El Lago Averno
El Lago Averno es un lago de agua dulce de 3 kilómetros de diámetro en Campania (Nápoles), al sur de Italia.
En realidad se trata del cráter de un volcán semiextinto, que de vez en cuando expulsa pequeñas cantidades de gases peligrosos y provoca terremotos de no mucha intensidad. De hecho, Averno tiene un origen griego que viene a significar sin aves, y se cree que este nombre nace de observar esas emanaciones nocivas, principalmente de sulfuros, y que todavía hoy se producen, que mataban a las aves que decidían habitar cerca.
Es famoso desde que llegaran los griegos en el siglo VII ANE, y fuera utilizado después como puerto militar por los romanos en el 37 ANE, momento en el que el lago fue conectado con el mar y renombrado como Portus Julius, aunque esto durase unos pocos años hasta su abandono.
A finales del siglo XVIII se construyó un nuevo canal hacia el mar.
Ya en el siglo XIX tuvo un renacer turístico gracias a historiadores y arqueólogos, hasta los bombardeos de la II Guerra Mundial.
Pero su fama no viene por motivos estrictamente históricos sino por las leyendas sobre una posible entrada al infierno.