El Dolmen de Alberite (Cádiz)
El Dolmen de Alberite es un dolmen de tipo galería ubicado dentro de la necrópolis "Alberite I" en Villamartín (Cádiz). Fue descubierto en el año 1993. Las rocas de caliza y arenisca utilizadas son procedentes de la zona del río Alberite y cerros próximos.
Toda la estructura estaría cubierta con un túmulo del que se conserva un anillo de piedras de 50 metros de diámetro que lo delimitaba. Este anillo exterior estaba construido con un murete de piedras de pequeño tamaño reforzado con otra serie de tirantes concéntricos en el interior del túmulo, cuya finalidad era contener los empujes del túmulo y mantenerlo agrupado, evitando los efectos de la erosión.
Antes de acceder al interior de la cámara, por el este, se atraviesa un atrio de 10 metros de extensión cuyo inicio se encuentra marcado por dos monolitos que conformarían una entrada monumental. En este atrio se localizaron cuatro estelas decoradas con motivos antropomorfos, una de ellas con nariz y ojos grabados, lo cual parece estar en relación con un espacio ritualizado en el que posiblemente se produjeran ceremonias en honor de los ancestros.
La galería, de 23 metros de longitud, se sustenta con enormes losas de piedra. El interior, estaba recubierto de una capa de color rojo, incluso el suelo estaba recubierto de una gruesa capa de ocre. En todos las losas hay símbolos, la mayoría pintados, otros grabados, concentrandose especialmente en lugares destacados, como el inicio y el final de la cámara. Los temas representados son muy variados: motivos geométricos, zigzag, hachas, cuchillos, soles, lunas, serpientes y seres antropomorfos. En esta construcción se ha podido comprobar que la decoración se realizó antes de su colocación definitica, ya que muchos se encuentran decorados en las caras no visibles. La mayor parte de los grabados se encuentran en la pared derecha, curiosamente juntos por pares y relacionados por temática.
Una vez superado el primer tramo, se accede a una cámara, semibloqueada por unas piedras en vertical que conforman una antecámara junto a la pared sur, donde se encontró un ídolo betilo (piedra sagrada) y zonas con restos de fuego, quizás para iluminación o ritual. Las losas rectangulares muestran figuras antropomorfas acompañadas de armas y serpientes, como si se tratase de representaciones de una divinidad protectora, guardiana de la cámara funeraria.
Al fondo de la cámara se define otro espacio reservado con otras dos losas que interrumpían su visión desde la entrada. En este lugar se localizaron los enterramientos de un hombre y una mujer de edad adulta. Sus huesos fueron descarnados y estaban cubiertos de ocre. El ajuar funerário lo componían 1600 cuentas de collar de variscita, hueso y concha, una paleta caliza para ocre, cuatro machacadores en caliza para ocre, una azuela y una gubia pulimentadas, cuatro láminas de sílex y un gran prisma de cuarzo de 20 centímetros de longitud.
Archivos
- Dolmen de Alberite: entrada (desde el este) y cubierta protectora (1)
- Dolmen de Alberite: vista interior desde la cabecera (2)
- Dolmen de Alberite: planta (3)
- Dolmen de Alberite: representación (4)