Felipe II: el segundo Rey Salomón
Desde mediados del siglo XX, los historiadores empezaron a elaborar una teoría sobre la relación entre el monasterio de El Escorial y el Templo del Rey Salomón, no solo en la forma, si no por ejemplo con la presencia de las dos estatuas de Salomón y David en la fachada. Esta teoría se refuerza debido a que históricamente hay multitud de referencias a esta comparación en la misma época en la que vivió el monarca Felipe II.
Según numerosos documentos que hablan del monarca, desde su viaje a los Países Bajos entre 1548 y 1551, donde sus súbditos los compararon varias veces con Salomón, trasladándole que así era el modelo de rey que esperaban, momento desde el cual empezó a sentirse especialmente interesado por la historia del tercer monarca del Reino de Israel.
En 1554, el por entonces rey de España Carlos V, a punto de abdicar en su hijo Felipe, para que no tuviera menor dignidad que su esposa María Tudor, le cede los reinos de Nápoles y Jerusalén. En el discurso ante el Parlamento con motivo de la boda, el consejero real y legado papal conmina a Felipe II a "reconstruir el Templo", como metáfora del restablecimiento del catolicismo en Inglaterra.
En 1555 durante el funeral de Carlos V, el obispo de Arras (Países Bajos), uno de los mejores oradores de la época, dio un sermón animando a Felipe II "como Salomón después de la muerte de su padre" a "reconstruir el verdadero Templo de Dios que es la Iglesia".
En 1557 se colocan en la Iglesia de San Juan Bautista (Saint Janskerk), la más larga de los Países Bajos con 123 metros, en la ciudad de Gouda, unas vidrieras donadas por Felipe II, llamadas "La Vidriera del Rey" En la parte superior defiende la presencia real de Dios en las iglesias con "La consagración del Templo de Salomón", donde el Rey de Israel deposita el Arca de la Alianza en el Sancta Sanctorum del Templo, el lugar donde Dios habitará desde ese momento en la Tierra.
Inmediatamente debajo, se defiende la presencia real de Dios en la Eucaristía, con una Última Cena frente a la que rezan precisamente Felipe II y su esposa María Tudor. En la corona de Jesús puede leerse el texto: "He aquí al que es más que Salomón" ("ECCE PLVS QVAM SALOMON HEIC"), uniendo los dos temas y ensalzando sutilmente a Felipe II como alguien que supera a Salomón.
Existe un cuadro de 1559 en la Catedral de Gante donde un rey Salomón (que claramente es Felipe II) recibe a la Reina de Saba y cuya cita bajo el marco reza:
Igualmente el otro Salomón, Felipe el más pío entre los soberanos, dio muestras de su impresionante sabiduría tanto aquí como en el extranjero.
(ALTER ITEM SALOMON, PIA REGUM GEMMA PHILIPPUS, UT FORIS HIC SOPHIÆ MIRA THEATRA DEDIT).
Aquel mismo año murió en Bruselas su perro "Salomón", uno de sus tres queridos perros de caza, su principal diversión.
Entre los años 1595 y 1606, una década después de la finalización de las obras de El Escorial, fue financiado personalmente por el propio Felipe II e impreso en Roma el llamado "Tratado de Villalpando", sobre el Templo de Salomón.
Es una muestra más del salomonismo de Felipe II, y probablemente una consecuencia de la colocación de las citadas estatuas de David y Salomón en El Escorial.